Seguro que tú también has soñado con celebrar una boda de destino: hacer las maletas y poner rumbo a otro lugar para volver a casa convertidos en matrimonio.
A día de hoy, celebrar una boda de destino es tendencia. Y es que, ¿A quién no le gustaría dar el “sí quiero” en una playa paradisiaca, en un desierto dorado, entre unos viñedos o en la cima de un acantilado?
Aunque esto pueda parecer algo difícil de organizar, ¡nada de eso! es mucho más sencillo de lo que imaginas y en Perfect Venue, gracias a nuestra gran experiencia en bodas de destino, podemos decirte que son todo ventajas.
¡Te las contamos a continuación!
Boda de destino.
Exclusividad y singularidad
Sí, celebrar tu boda en un lugar lejano hará que tengas una boda diferente, atractiva, exclusiva y única. ¡Dejarás atrás los clásicos salones de bodas para aparecer junto a tu pareja en medio de un bosque, prado, hacienda o resort! Cualquier destino del mundo que elijáis dejará a todos con la boca abierta.
Boda de destino.
Paisajes espléndidos
Una de las mejores ventajas de celebrar una boda de destino son los telones de fondo con los que contarás. Porque ya sabes que viajar te ofrece escenarios dignos de película. Ya sea que optes por la cima de una montaña, una isla remota, el borde de un acantilado o un castillo encantado, el paisaje será único en su especie.
¡Lo mejor es que esto hace que no necesites demasiada decoración! Porque, de por sí, el espacio ya ofrece una estética espléndida.
Boda de destino.
Experiencias inolvidables
Viajando a lugares nuevos conocerás gente local y nuevas culturas, lo que puede hacer que os planteéis hasta llevar a cabo una celebración fuera de lo común y hacer que un chamán os case en una ceremonia maya en Cancún o en Guatemala o hasta en Sudáfrica por el rito zulú. ¡Y podréis aprovechar para degustar en un día tan importante esos platos típicos de la región con los que siempre soñaste probar!
Boda de destino.
Boda y luna de miel, ¡2 x 1!
Además de celebrar tu boda de destino, también puedes aprovechar el lugar para realizar la luna de miel e incluso empezarla con los familiares y amigos que os acompañan. ¡No os podéis ir sin explorar el lugar a fondo! ¿Qué tal realizar actividades como buceo, catas de vino, remos, excursiones o relajarse en un SPA?
Boda de destino.
Fotografías conmovedoras
Sí, una boda de esta índole es tener unas fotografías impresionantes en un escenario perfecto. Imagina cuando pasen los años y volváis a abrir el álbum de fotos y recordéis el telón de fondo que conformaba vuestra boda. ¡Las fotos son para toda la vida! Y, con el paso del tiempo, estas os demostrarán que celebrar una boda de destino fue la mejor decisión que pudisteis tomar.
Boda de destino.
Presupuesto reducido
Aunque no lo creas, el presupuesto podría reducirse en una boda de destino, esto es porque se cuenta con menos invitados que en una boda convencional. Muchos destinos también ofrecen ofertas y precios especiales para este tipo de eventos con los que te puedes ahorrar bastante dinero, ¡y lo puedes invertir en otros detalles para este gran día!
Boda de destino.
Tus invitados más importantes, presentes
En una boda que se celebre en un lugar lejano contarás solo tus invitados más importantes y especiales, ya que las bodas tradicionales cuentan con cantidad de invitados, mientras que en una boda de destino estos suelen ser como mucho 40 personas, ¡no todos hacen un viaje y pierden días de trabajo para asistir a un enlace! Por ello, tendrás claro que los que os acompañan en ese día realmente querrán estarlo. ¡Así es mucho más fácil evitar los compromisos!
Boda de destino.
Más tiempo para compartir con tus allegados
En una boda tradicional uno suele estar de prisa y corriendo, organizando cada detalle, lo que hace que el día de la fiesta sólo tienes unas cuantas horas para poder convivir un poco con cada uno de tus invitados. En cambio, en una boda destino sueles tener de dos a tres días para poder pasar tiempo con todos ellos, en calma y en un ambiente sin presiones.
Boda de destino.
Nada de estrés con la organización
Hay muchos Wedding Planners que están especializados en bodas de destino, ellos conocen el área a la perfección y tienen toda la experiencia al respecto. Esta es una manera de que os libréis del estrés de planear una celebración tan colosal. Vosotros sólo os tenéis que bajar del avión y firmar los papeles, tu Wedding Planner se encargará del resto.
Boda de destino.
Fin del debate “su ciudad natal” vs. “mi ciudad natal”
Si tú y tu pareja nacisteis y crecisteis en ciudades lugares y no estáis seguros de en qué ciudad os debéis casar, una boda de destino es la solución perfecta. No tendréis que debatir ni elegir entre el lugar donde tendrá lugar la boda. Una boda de destino… ¡hasta evita discusiones!
Boda de destino.
Adiós a la rutina
Realizar un viaje, casarse en él, ir acompañado de familiares y amigos es, sin duda, romper con la rutina. Una ocasión perfecta para pasar tiempo con esa gente que no estás en tu día a día y que es tan importante para ti. Aprenderás otra cultura, probarás nuevas gastronomías y, volverás con aires renovados, con una experiencia vivida y relajado y descansado del bullicio del día a día.
Aunque una boda de destino pueda provocar algo de incertidumbre o miedo a la hora de llevarla a cabo, como se ha podido comprobar, son todo ventajas. ¡Y en Perfect Venue estamos especializados en ellas!
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