Los mismos novios que huyen del invierno y del frío, son todos aquellos que tienen en mente la primavera como principal opción para casarse.
¡Y como para no! Esta estación es la favorita de muchos por ser preciosa por naturaleza. Y es que los colores están más vivos que nunca, los pájaros ya empiezan con sus cantos, salen los primeros rayos de sol y los árboles y campos se llenan de flores.
Así que, ¿qué mejor que esta estación que nos ofrece una oportunidad perfecta de decoración natural para juntar a todos vuestros seres queridos y caminar hacia el altar?
Y como sabemos que estás leyendo esto porque quieres inspirarte para tu boda en primavera, mira todas estas ideas y consejos que te dictamos para tener una completamente original y colorida.
Invitaciones llenas de color
Con este elemento provocamos el primer impacto en nuestros invitados, así que deja de un lado la sobriedad y decántate por lo llamativo, los tonos pasteles, las acuarelas y la infinidad de mezclas de colores para acentuar más esta temporada.
Con las invitaciones ya podemos acercarnos a la primavera seleccionando algún diseño que la inspire, como tarjetas y sobres llenos de color e ilustraciones de pájaros, flores, árboles, o hasta un dibujo del lugar de la ceremonia.
Además, estas pueden estar cerradas con alguna pequeña florecilla natural, ramas o palos para estar acorde aún más con la estación.
¡Que rebosen las flores!
Uno de los elementos característicos por naturaleza de la primavera son las flores, y las grandes protagonistas de cualquier evento, así que, nada mejor que incluirlas por todos lados.
Rosas, hortensias, peonías, orquídeas, amapolas, margaritas… las combinaciones son infinitas y las hay en cantidad de colores, mezcladas con hojas, ramas y palos. ¡Aprovecha que la primavera te sirve en bandeja las flores y opta por las naturales!
Que se dejen ver por los rincones, los centros de mesa, en el altar, en el ramo y hasta a modo de cortinas. ¡Dan mucha alegría y forman el escenario primaveral perfecto!
Rompe esquemas con los trajes
Con la retirada del frío, de los abrigos y de las capas, vienen los escotes, las espaldas al aire libre, los tejidos vaporosos y las transparencias. ¡Nada de lo de que preocuparse porque hay multitud de opciones!
Abre paso a los tonos pasteles y los duraznos y aparta el blanco convencional, añade algún estampado floral, bordados ¡y mucho tul! ¿Lo mejor? ¡Que son tendencia!
El novio también puede olvidarse del traje negro clásico y enfundarse en un traje gris o azul marino, una apuesta rompedora que sin duda captará miradas por doquier.
Acompaña el look con detalles florales
Con tocados de flores naturales en tu peinado, (ya esté suelto o recogido), con elegantes broches, en los zapatos, en el bolsillo del novio, en la pajarita o hasta en los gemelos.
Lo que está claro es que las flores en tu vestimenta te van a aportar el toque primaveral que necesitas.
¡Al aire libre y a cubierto!
¿Por qué elegir una opción si ambas son válidas? Si hay algo que permite una boda en esta estación es hacerlo al aire libre, con espacios llenos de color y sin el calor exagerado del verano.
España, ese país que nos ofrece numerosas posibilidades como las playas de la Comunidad Valenciana, los prados de Asturias, los viñedos de Castilla-La Mancha, las fincas de Andalucía, los pazos de Galicia, las masías de Cataluña, el Valle del Jerte de Extremadura o la floración de Cieza, en Murcia.
Todos son lugares de cuento para tu boda, pero, elijas el que elijas, no olvides contar con un plan B, como una carpa para estar a cubierto a unos salones muy próximos para evitar los imprevisibles chaparrones que surgen en esta época del año.
No te preocupes por estos detalles, en Perfect Venue con nuestra Wedding Planner, nos encargamos de todo.
Crea un ambiente especial con la decoración
La mezcla de la primavera y las flores conforman un entorno de lo más romántico, y más si se celebra al aire libre, por lo que una opción de lo más en auge es la temática rural o vintage.
¡No tengas miedo a ningún elemento! Columpios, arcos florales, jarrones de hojalata, farolillos, jaulas, palés de madera, tinajas, cestos de flores y hasta bicicletas.
Y que no falte la iluminación, en forma de guirnaldas, velas por las mesas, el altar y en la pista de baile, ¡pura magia!
Eso sí, todo acompañado siempre de mucho color, olvídate de los tonos oscuros y clásicos y da pie a los rosas, amarillos, naranjas, verdes… ¿será por composiciones?
Frescura también en el banquete
En primavera el menú también se diferencia de las bodas del resto del año, y es que no faltan las ensaladas, las pequeñas tapas y snacks y las salsas frescas. ¿Pero para beber qué? Pues limonadas, sorbetes, sangría, calimocho… ¡Todo de lo más refrescante!
Y servido en una vajilla acorde, como con motivos florales y en los tonos del resto del espacio.
¡No te olvides de los postres! Donde pueden abundar las frutas, los helados, y la tarta nupcial. Di adiós a lo clásico y opta por lo llamativo y lo vistoso, como las tartas que están pintadas a mano o con elementos de la naturaleza como los pétalos, ¿sabías que hay flores comestibles?
Ahora ya tienes muchas más ideas para tu boda en primavera, ¡que no se te olvide ninguna! y es que ya sabes el dicho… la primavera ¡la sangre altera!
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