Playa o montaña, valles o ciudades llenas de historia. Asturias es un completo paraíso que cuenta con un encanto especial a orillas del Mar Cantábrico y que destaca por tener un paisaje completamente verde que enamora a cualquier persona que se acerque a sus acantilados, se bañe en sus playas de película o suba a la montaña para visitar uno de los pueblos en los que parece que no ha pasado el tiempo. Celebrar tu boda de destino en Asturias es poder elegir un enclave tanto rural como urbano para este día. Ambas opciones ofrecen un paisaje de cuento donde además de dar el “sí quiero” os permite realizar multitud de actividades.
Ya sabéis que celebrar una boda de destino y no pasar unos días para conocer el mismo sería imperdonable, por lo que a continuación os dictamos unos cuantos planes que hacer en Asturias antes de abandonar esta tierra:
- Siente el vértigo con la Ruta del Cares, donde caminarás entre abruptas paredes de roca. Una ruta tallada en las rocas de la montaña entre las localidades de Caín y Poncebos pasando por el río, caseríos, el chorco de los lobos y varios miradores.
- Visitar el centro futurista Niemeyer, en Avilés, una obra Patrimonio de la Humanidad donde acudir a actuaciones de importantes artistas, ver exposiciones y probar la gastronomía de prestigiosos cocineros además de tener las mejores vistas panorámicas de la ciudad.
- Visita Cudillero, uno de los pueblos más bonitos de Asturias por ser una villa marinera que conserva todo su encanto con una explosión de color. Pasea entre sus callejones y déjate asombrar por sus casitas blancas tradicionales con marcos multicolores.
- Haz surf en las playas de rompientes olas. Asturias es el lugar perfecto para llenarte de adrenalina, principalmente en la Playa de las Salinas, en la Playa de San Lorenzo o en la Playa de Otur. ¡Acaba la tarde viendo el atardecer tan precioso que ofrecen estas playas!
- Degusta la gastronomía típica de Asturias en su capital de provincia, Oviedo, yendo de bar en bar en la famosa calle Gascona, sin olvidar beberte unes sidrines o comerte una fabada, un cachopo, o el pote asturiano. Una gastronomía que se ha ido transmitiendo de generación en generación y que aún se conserva.
- Recorre en coche La Cuevona, una de las pocas cuevas por las que se puede transitar con coche y donde quedarse con la boca abierta por las impresionantes formaciones calcáreas, la oscuridad y las estalactitas y estalagmitas. ¡Una visita de lo más original!
- Descubre el Museo de la Minería y de la Industria bajando hasta las profundidades en “la jaula”, un ascensor típico minero que baja hasta 600 metros bajo tierra para hacerte sentir como un auténtico minero, donde escuchar el ruido de los martillos o incluso realizar un paseo en el tren que utilizaban los trabajadores de la minería antiguamente.
- Acércate a las increíbles vistas que ofrecen los acantilados, como es el caso de Cabo Vidio, que ofrece unas puestas de sol impresionantes, la Playa del Silencio con bravíos acantilados o en Busto, con tremendos acantilados que rodean el faro y con una de las mejores pastelerías de España donde probar los populares postres asturianos.
- Visitar los Lagos de Covadonga, de origen glaciar con tres lagunas que además te permiten alojarte en una de sus casas rurales, refugios o albergues. Que no se te olvide visitar el Santuario o la Santa Cueva, encima de una cascada de agua y excavada en la roca donde descansa la patrona de Asturias.
- Desciende por el Sella en canoa, disfruta de este recorrido lleno de naturaleza lidiando con las corrientes del Sella montado en canoa con total seguridad y lleno de emoción. ¡Se puede cruzar hasta la frontera con Galicia en este descenso fluvial!
- Piérdete por los bosques con la Ruta del Infierno, por la que atravesarás robles y castaños, foces, un espectacular hayedo, cascadas, desfiladeros y donde encontraremos al paso zonas recreativas con mesas y bancos donde descansar y reponer fuerzas y hasta una casa típica asturiana.
- Recorre la villa de Taramundi y conoce el arte de la cuchillería, el museo más grande de Molinos de España o el museo Etnográfico de Esquíos, con millones de piezas antiguas. Además, probarás sus quesos más típicos y sabrosos. Todo ello con el agua de protagonista, todo entre ríos y arroyos.
Estas son algunas de las razones por las que celebrar tu boda en Asturias y además pasar una temporada para conocer la historia, la cultura y los modos de vida de los asturianos, tan buena gente por naturaleza, con buena accesibilidad a cualquier zona y con una de las mejores gastronomías del país.
Esto es Asturias y como casarte en un entorno acogedor, de ensueño, y repleto de calidez que ofrece numerosos planes para que te lleves la memoria repleta de buenos recuerdos.