En este post os presentamos a una novia romántica, con un look tremendamente femenino, fino y con clase, elegancia y lleno de gran delicadeza. Antes de los preparativos para el gran día, la novia se dejó ver con un veraniego pijama formado por una camiseta de tirantes finos de encaje y un corto pantalón de raso con también encaje en los bajos.
Este pijama lo acompañó de una bata a conjunto, de tela de raso y con los puños de las mangas y el corte de esta, rematados en encaje. El vestido nupcial estaba diseñado por Gisele La Unike, con tejido de tul y tul plumeti, con mangas ajustadas hasta la altura del codo, volantes desde el codo hasta la muñeca con calados y bordados florales.
Este vestido lleno de transparencias dejaba la espalda al descubierto, formando así un escote invertido. La falda era de un patrón liso y básico y con un cierre trasero a forma de lazo, dando así toda la importancia a la parte superior del cuerpo, al estar más recargada y ser más voluminosa. Cabe destacar el fino velo que acompañó a la novia con pequeños bordados en los bordes de este.
La joven novia estaba radiante con el maquillaje suave y natural del que, junto con el peinado, se encargó Laura Oceanía.
En primer lugar, la novia contó con un semi-recogido con pequeñas florecillas a modo de tocado de joya, de La Unike Novias, y posteriormente lució una cola denominada cola de caballo, que serán tendencia en esta temporada entre las novias. ¡El resultado os va a enamorar!
El coletero quedó cubierto por un fino mechón de pelo con todo este ondulado, este recogido fue decorado con dos broches de joya de la misma firma, a modo de tocado a ambos lados de la coleta que imitaban unas pequeñas flores blancas.
En La Unike Novias no hay dos piezas iguales, ya que estas joyas son completamente artesanales y diseñadas a tu medida. En cuanto al novio, este optó para el gran evento un traje de chaqueta azul marino junto con una camisa blanca básica y una corbata granate. Lleno de sofisticación y clasicismo con este traje de corte limpio.
Del ramo y de la decoración en general se encargaron De Blanco y Menta y Savia Bruta, que eligieron los tonos pasteles de los colores blancos, azules, rosas y naranjas.
En el ramo de la novia predominaron las rosas de varios tamaños en tonos anaranjados y rosáceos, mezcladas estas rosas entre hojas de un suave tono verde.
A las flores les acompañaron jaulas con flores en su interior, velas con candelabro plateado y dorado y una vajilla que constaba de platos blancos y dorados a conjunto con los cubiertos.
También se disponían sobre las mesas copas y vasos de vidrio rosado al igual que la servilleta. Las hojas verdes también se dejaron ver a lo largo de toda la mesa del banquete mezcladas con las flores en los colores pasteles mencionados anteriormente.
El lugar seleccionado fue el Hotel Meliá Madrid Princesa, situado en el corazón de esta ciudad, un lugar ideal para compartir con tu pareja e invitados y con las mejores vistas de toda la ciudad, donde celebrar tanto la ceremonia como el banquete, con música en vivo, niñera, alojamiento, guardarropa, etc.
De la fotografía y organización de la boda se encargaron la fotógrafa Tanya y la Weddings and Events by Natalia Ortiz. ¡Seguro que este post os ha despertado la inspiración que estabais buscando!
The wedding team:
Venue: Melia Princesa // Planning: Weddings and Events by Natalia Ortiz // Photography: Tanya Vasiliuk // MUAH: Laura Oceania // Bride dress and headpice: Giselela unike // Flowers: @saviabrutaflor // Deco + flowers: De Blanco y Menta