Viajar y ayudar, ¿hay mejor complot que este para tus vacaciones? Este es el mix perfecto para hacer de estos días de descanso una experiencia enriquecedora a nivel personal y profesional, donde además empaparse de la cultura del país, conocer a sus gentes locales y ayudarles en todo lo que necesiten, siempre de manera sostenible, por medio del llamado viaje de voluntariado vacacional, también denominado volunturismo.
Y es que, para convertir tu viaje en solidario, no hace falta que te muevas hasta la otra parte del mundo, ya que, en países como España, esta práctica también es muy necesaria. España cuenta con kilómetros de costas y mares, especies autóctonas, etc.
Pero ¿qué conseguimos con esto?
Pues son enormes las ventajas que un viaje de esta índole provoca en la persona, como por ejemplo desarrollar valores y ser más empáticos y tolerantes, practicar un turismo responsable con el medio ambiente y con sus gentes autóctonas y todo mientras vives una experiencia única en un lugar diferente, a través de nuevas culturas y tradiciones.
¿Qué actividad de volunturismo es la mía?
Entre las actividades de voluntariado que se pueden encontrar en España, está la conservación de costas de Canarias, concretamente en La Graciosa, en la isla de Lanzarote. Un periodo vacacional en el que podrás limpiar las playas y acabar con los plásticos que inundan el mar y el océano, e incluso rescatar algún que otro animal afectado.
También es muy común la conservación de aves marinas en el océano Atlántico o la conservación de especies para mejorar sus hábitats en lugares como Segovia, Toledo, Jaén o Ciudad Real, unas provincias emblemáticas donde poder tratar con aves rapaces, conejos, nutrias, buitres o linces, entre otros.
Hasta los más pequeños se pueden involucrar en una de estas labores mediante los diferentes campamentos que se realizan en España para conocer y conservar la naturaleza y así vivir el medio ambiente en toda su esencia mediante talleres y excursiones, siempre en contacto con el entorno y observar especies que están en su hábitat o en peligro de extinción.
Otra de las actividades que se pueden llevar a cabo es el, tan importante, reciclaje, para concienciarnos de la importancia del mismo y hacérselo ver a más personas para poder mantener todo libre de basuras y residuos.
Pero si eres un amante del deporte, te sentirás completamente realizado tras un programa de voluntariado con todas aquellas personas que sufren de cualquier tipo de discapacidad mediante su integración en la sociedad a través de la práctica deportiva.
También hay numerosos proyectos sociales en ciudades como Valencia o Salamanca, para trabajar con personas que están sin hogar o en situación de pobreza o exclusión, al igual que en proceso de inserción o rehabilitación.
Estar concienciados antes de empezar una de estas prácticas es muy importante, puesto que no son unas vacaciones de relajación y descanso, sino unas vacaciones que requieren un trabajo de esfuerzo físico, compromiso y dedicación. Y siendo conscientes de que no conlleva remuneración, pero sí ganarás una experiencia increíble y una satisfacción personal, aprenderás sobre conservación y naturaleza y además te inundarás de sabiduría con gente con tus mismas aficiones e intereses.
Ve más allá de un viaje convencional y participa poniendo todo tu corazón en una de estas jornadas de voluntariado para empaparte de educación ambiental, defender el planeta para nuestro futuro, ayudar, conocer y conservar floras, faunas y suelos que tanto nos necesitan.
¡Disfrutarás contribuyendo hacia un mundo mejor!